Consejos de nutrición para tener un cerebro sano

Nuestro cerebro es una máquina perfecta, formada por neuronas y células, que contiene un precioso tesoro de experiencias y recuerdos que nos hacen ser las personas que somos. Es una caja fascinante en la que se almacenan cosas nuevas cada día que nos permiten mantenerla en forma y mejorar su mecanismo.

Para mantener nuestro cerebro en forma debemos seguir una serie de consejos todos los días, tales como una alimentación adecuada y hábitos de comportamiento que permitan a nuestra materia gris gozar de una excelente salud y, en consecuencia, evitar, o al menos retrasar, el desarrollo de ciertas enfermedades.

A veces, es precisamente un estilo de vida desequilibrado el que causa algunos trastornos que podrían evitarse. De hecho, el estrés, la hipertensión, el colesterol, la obesidad pueden empeorar y convertirse en la causa de accidentes neurovasculares. A menudo el origen de un simple dolor de cabeza está relacionado con un día de estrés y ansiedad.

Consejos de nutrición para tener un cerebro sano

La dieta mediterránea

Las investigaciones muestran que una dieta mediterránea rica en pescado, granos enteros, vegetales de hojas verdes, aceitunas y nueces ayuda a mantener la salud del cerebro y puede reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer.

Cocina y come alimentos frescos, saborea el sabor, disfruta de una cena con familiares y amigos. Un régimen mediterráneo es más que una dieta. Es un estilo de vida, una forma de vivir bien.

Limitar la carne roja

Comer alimentos ricos en grasas saturadas, como la carne roja, la mantequilla y los productos lácteos, está asociado con el desarrollo de enfermedades degenerativas, como las enfermedades cardíacas y la enfermedad de Alzheimer.

No olvides el pescado

El pescado es una gran fuente de omega-3, el tipo de ácido graso que su cuerpo no puede producir, y es bueno para tu cerebro. Al menos dos veces por semana, come cinco onzas de pescado rico en omega-3, como el salmón, el bacalao, el abadejo, el atún o el fletán.

¿El pescado no es lo tuyo? Prueba las nueces, semillas de lino o soja en su lugar.

Consume frutas y verduras

La espinaca, col rizada, brócoli y otras verduras de hoja verde son ricas en muchos nutrientes que benefician al cerebro. Los arándanos, las frambuesas y las moras están llenos de antioxidantes; potencialmente pueden retardar el envejecimiento en el cerebro y en otros lugares.

Elige el chocolate oscuro

El chocolate oscuro contiene flavonoides, que son antioxidantes fuertes. Potencialmente mejoran el flujo de sangre al cerebro y reducen la inflamación. El polvo de cacao sin azúcar ofrece el mayor beneficio, seguido del chocolate oscuro con al menos 72 por ciento de sólidos de cacao.

Dale sabor a tu vida

Muchas hierbas y especias, como la cúrcuma, la canela y el jengibre, contienen antioxidantes que pueden disminuir la inflamación dañina en el cerebro y en otros lugares. Los sabores fuertes y los colores brillantes e intensos son indicios del beneficio que se esconde dentro de tu gabinete de especias.

Toma una taza de café o té

Se ha demostrado que el café, una de las bebidas más populares del mundo, mejora la memoria y potencialmente reduce el riesgo de demencia. Se recomiendan hasta tres tazas de café negro al día. Los tés negros y verdes también contienen antioxidantes que estimulan el cerebro.

Brindar por tu buena salud

Beber vino tinto con moderación. El resveratrol, que se encuentra en el vino tinto y en la piel de las uvas rojas, es un potente antioxidante.

El resveratrol posiblemente puede reducir el daño celular asociado con el envejecimiento y puede proteger contra la formación de placas dañinas en el cerebro. Se adhieren a las cantidades diarias máximas recomendadas de una copa para mujeres y dos para hombres.

Comer muchos granos enteros

Los granos integrales, como la avena, la cebada y la quinua son ricos en muchas de las vitaminas B que trabajan para reducir la inflamación del cerebro y preservan la memoria.

Comer huevos en moderación

La proteína y las vitaminas B, D y E en los huevos y las yemas de huevo pueden ayudar a mejorar la memoria. Puede obtener los beneficios de estas vitaminas mientras mantiene su colesterol al mínimo mezclando huevos enteros con claras de huevo para redondear su tortilla o huevos revueltos.

Los beneficios potenciales de los suplementos

Una combinación de vitaminas C (500 mg) y E (400 unidades internacionales) ha demostrado ser un beneficio potencial para la salud del cerebro. Los suplementos de aceite de pescado ricos en DHA (hasta 1,000 mg por día) son, así mismo, una buena alternativa.